buscando el sueño americano

EL DURÍSIMO CRUCE

Este es el desgarrador testimonio de Anderson, un niño hondureño de 8 años que caminó junto a su padre hasta llegar a la frontera de Estados Unidos para pedir ayuda. ⁠

Al duro recorrido de unas 1,500 millas se le suma la pérdida de parte de su familia por la violencia, cada vez más grave en los países de Centroamérica. “Mi mami murió“, dice entre sollozos. ⁠

“Allá está muy dura la situación”, explica su padre, quien en medio del dolor tiene la esperanza de poder entrar a territorio estadounidense en busca de una mejor vida.



Fuente: Ayyy Don Este