Con posterioridad, el exgobenante «fue beneficiado con la primer prórroga y nueva fecha, utilizó los plazos al límite para estirar el trámite de la causa, que a pesar de las declaraciones públicas propias como las de su defensor, no realizó ninguna presentación espontanea para dar señales de su voluntad de ponerse a derecho, de su voluntad de cumplir con sus obligaciones», advirtió la letrada.
Carreras también señaló que las intenciones de Macri de recusar al juez no justifican su ausencia en una declaración indagatoria.
El abogado argentino Luis Tagliapietra, querellante en esta misma causa en representación de 17 familias, solicitó el mismo 7 de octubre que se declarase en rebeldía a Mauricio Macri y se reclamase su captura internacional.
El artículo 288 del Código Procesal Penal señala que «será declarado rebelde el imputado que sin grave y legítimo impedimento no compareciere a la citación judicial, o se fugare del establecimiento o lugar en que se hallare detenido, o se ausentare, sin licencia del tribunal, del lugar asignado para su residencia».
Seis hechos de espionaje
El juez Bava quiere interrogar a Macri, sobre el que pesa una prohibición de salir del país, por seis hechos de espionaje ilegal.
El expediente analiza si durante la gestión anterior se realizaron tareas de espionaje desde la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) a los familiares de los 44 tripulantes que naufragaron en el submarino de la Armada (ARA) San Juan el 15 de noviembre de 2017.
La causa se inició el día 23 de septiembre del 2020, a partir de una presentación realizada por la actual interventora del organismo de inteligencia, Cristina Caamaño.
En su presentación, Macri fue denunciado por ser el responsable de fijar los lineamientos estratégicos y objetivos generales de la política de inteligencia.
En el expediente se encuentran procesados, con la confirmación de la Cámara Federal de Mar del Plata quien fue el director de la AFI durante el Gobierno anterior, Gustavo Arribas, y de la subdirectora, Silvia Majdalani.