Este caso es digno de análisis, muy hábiles quienes lo tramaron, de mi parte diré

LA CLÍNICA SANTA MARÍA, LA GOBERNACIÓN, LA JUSTICIA Y LA AUTONOMÍA

👉 Opinión
Dorita Montenegro, abogada
Textual

1) Una cosa es la corrupción que pueda haber en el caso por pago o no pago de una de las herederas del Dr. Urenda, habiendo muchos otros casos de clínicas ilegales,
2) El argumento del SEDES jurídicamente es válido en este caso, porque no puede haber un centro médico sin responsable legal, eso es un crimen, si sucede algo en ese centro quién respondería, nadie y el paciente como sus familiares quedarían sin justicia, de manera que sí o sí es un requisito a cumplir,
3) En cuanto a la autonomía, no tiene nada que ver, un centro o cualquier entidad que funcione sin los requisitos legales debe ser cerrado, siempre que la falta de ese requisito pueda amenazar o afectar derechos fundamentales, cuya protección no se rige por la autonomía, sino por otra reglas territoriales en razón a quien plantea la acción o donde se agreden los derechos fundamentales,
4) Imagino que acá, la tesis fue que al cerrar la clínica no sólo se atentaba contra la vida de los pacientes que se supone van voluntariamente allí, pero además que se los estaba también lesionando su derecho a la locomoción a trasladarse de un lugar que han elegido a otro que no han elegido para curarse,
5) Seguro la solución que encontró la sala fue aplicar el principio de ponderación que un formalismo de falta de representante legal, no podía estar por encima de la vida y la libertad física; sin embargo la tesis que pienso tomo la Sala de la Acción de Libertad, es muy peligrosa porque si sucede algo en la Clínica, los responsables tendrían que ser los Vocales y ya no os del SEDES. Mas o menos así veo el caso. Pero vuelvo a repetir es un para un buen estudio.



Fuente: Ayyy Don Este