Yo no quiero que el Estado Patrialcal proteja más a las mujeres, yo quiero que las mujeres tengan el poder de defenderse ellas mismas.
Nada más democratizador del poder que poder tener un arma.
Si las mujeres tuvieran el derecho de elegir portar armas de fuego, con la simple duda de que una posible víctima esté armada, el delincuente no estará tan seguro como ahora de la vulnerabilidad de ella.
Nada más desmotivante para un delincuente que la posibilidad de pillarse con un policía armado en un lugar… y como no hay suficientes policías como para poner uno en cada cuadra, mejor abrir la posibilidad de poner un arma en cada mano femenina.
OJO: la portación y uso de armas de fuego requiere estabilidad psicológica y capacitación.
¿Te imaginás un Taller Prefectural de Capacitación Femenina de Uso de Armas de Fuego? Creo que es más coherente que los cursos de maquillaje o repostería para empoderamiento femenino que hoy dan.
Hago mucho hincapié que la simple duda de un asaltante a que su víctima esté armada es un desmotivante, hoy los delincuentes están SEGURÍSIMOS que las víctimas están desarmadas y vulnerables.
shalom aleichem