Muchas personas creen que la inteligencia está en encontrar al culpable, pocas en ver las responsabilidades… pero la verdadera inteligencia está en plantear soluciones y tomar acciones.
La señora Gabriela Oviedo es de estas últimas pues aborda un tema que puede ayudar a solucionar muchísimos problemas en nuestra sociedad: el amor propio desde la individualidad… y esto libera.
Es un libro simple como un anillo pero nada secillo. Su estilo casual pero de elegante escritura no debe hacernos pensar que es superficial o cliché, pues analiza temas muy profundos, como la felicidad y los valores, y es aún más rescatable cuando demuestra en la práctica ese amor propio exponiéndose personalmente en sus páginas a cualquier toxicidad de “los críticos”.
Y es que la verdadera maestría no está en el opasolemnerío si no en que quien mejor domina un tema es quien más simple lo explica.
Tengo la tentación de recomendarlo como regalo del día de la madre, pero en realidad no tiene limitante de género cuando podemos regalar un instrumento para que cualquiera pueda tener un poco más de amor propio y seguridad.
shalom aleichem