EE.UU en lugar de publicar informes antidroga sesgados, manipulados y con fines puramente políticos, debiera mirarse en el espejo de su descomposición política y social y asumir su responsabilidad frente al consumo interno desbocado, al lavado de dinero en sus paraísos fiscales, a la producción genocida de armas y a su impulso suicida de provocar guerras y destruir la madre naturaleza.
Fuente: Detrás de la Verdad