El expresidente Evo Morales compartió en sus cuentas de redes sociales un manifiesto en el que afirma que «el censo ha sido satanizado para romper el orden constitucional».
Asimismo, advierte «que la confrontación violenta es una trampa de quienes no aceptan vivir en democracia».
Este es el texto completo:
La coyuntura que atraviesa el país es extremadamente critica debido a los afanes desestabilizadores a la democracia y a nuestro gobierno por parte de una minoría antidemocrática y golpista que se encuentra desesperada, lo que se expresa en su línea discursiva confrontacional y de provocación cuyo único afán es enlutar a las familias bolivianas, tal como lo hicieron en innumerables masacres que se pueden contabilizar a lo largo de la historia de nuestra querida Bolivia, teniendo en “octubre negro” y los genocidios de Senkata, Sacaba y Pedregal, los más recurrentes en nuestra memoria colectiva, lo que nos exige pronunciarnos ante el pueblo boliviano y la comunidad internacional en los siguientes términos:
1º La actual reconfiguración del orden mundial del ciclo de la hegemonía unipolar de EEUU hacia una nueva etapa multipolar donde se proyectan los bloques regionales como factores de poder en el nuevo diagrama de fuerzas a escala internacional, ofrece a Bolivia inconmensurables posibilidades de crecimiento y expansión económica, más aún con la victoria democrática de nuestro hermano Lula da Silva en las elecciones de Brasil, lo que permitirá revitalizar UNASUR, MERCOSUR, CELAC y los BRINCS, para promover lazos de integración con base en el respeto de la soberanía de los Estados y de la autodeterminación de los pueblos, para promover un mundo de paz, armonía, reciprocidad, solidaridad, comercio justo, progreso y desarrollo que trascienda del antropocentrismo de la codicia individualista y preserve también los derechos de la Madre Tierra para “vivir bien”, compatibilizando el desarrollo económico con la Justicia Social.
2º La inmejorable oportunidad para nuestra querida Bolivia de consolidar el salto a la industrialización mediante el aprovechamiento de la siderurgia del hierro del mutún en el oriente y del aprovechamiento del Litio y sus derivados de la región andina y subandina como pilares fundamentales que nos permitan alcanzar una expansión económica sin precedentes en beneficio del conjunto del pueblo boliviano, eliminando así las contradicciones regionales y raciales.
3º Sin embargo siempre va existir una minoría racista y antipatria que sólo aspira a defender su “estatus señorial”, frente a lo que considera la agresión del plebeyo y del indígena (que puede ser camba o colla, lo que explica la cobarde agresión a las indígenas ayoreas en Concepción o el desprecio al migrante a quien denominan “horda”, cual si fuéramos animales primitivos merecedores de todos los vejámenes. Estas “castas” siempre han recurrido a pretextos manipulando la religión, deformando la realidad a través de la mentira para intentar, una y otra vez, apuñalar a la patria puesto que ellos se conforman con su condición de celestinaje servidumbral de la filibusteria externa. Por eso ven en el Mas a su enemigo histórico puesto que, a partir de la nacionalización de nuestros recursos naturales, rompimos la dependencia de las recetas privatizadoras y de estrangulamiento impositivo del Fondo Monetario Internacional que convirtió a los gobernantes en “limosneros”. Además, confrontan al Estado Plurinacional porque no aceptan la ruptura de la colonialidad que consiste en que no existan ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda (indios, obreros, y demás sectores populares a quienes miran como cambas, cunumis y collas).
4º El censo que es una herramienta técnica de verificación de nuestras características demográficas y de los indicadores de medición económica y social que le son consustanciales, ha sido “satanizado” para romper el orden constitucional , desestabilizar al gobierno y confrontar a los bolivianos y bolivianas a través de la violencia para provocar muertes ( tal como lo hicieron en Sacaba y Senkata), con la esperanza de escarmentar al indígena y de responsabilizar al proceso de cambio como el autor de las muertes (recordemos que Murillo justificaba las masacres de los golpistas afirmando que “se dispararon entre ellos” ).
5º Compartimos el profundo dolor que embarga al pueblo boliviano por las muertes provocadas por los golpistas y comprendemos la impotencia de las familias de las víctimas por la impunidad, razón por la que exigimos que la justicia cumpla su responsabilidad de castigar a los responsables de las muertes provocadas. Es hora de que la justicia deje de lado su servilismo al cuoteo de cargos, corrupción y manipulación política, para ponerse al servicio de la Constitución, la ley y el clamor de justicia de las víctimas del golpe.
Hacemos un llamado a nuestras organizaciones sociales y a todos los sectores movilizados a no caer en la confrontación violenta y a respetar los avances alcanzados en los escenarios de diálogo, respetando los mecanismos institucionales para restituir la paz y la armonía de las y los bolivianos, con el fin de llegar a una solución pacífica y democrática basada en el entendimiento mutuo.
6º Por otro lado, pedimos tomar conciencia acerca del sufrimiento y pérdidas económicas por parte nuestros hermanos gremiales, comerciantes, transportistas, pequeñas industrias, empresarios industriales, agroindustrias, exportadores pequeños, medianos y grandes, productores de toda la cadena productiva que se complementan unos a otros y forman parte de la estructura económica de Santa Cruz y del país. Estos hermanos están siendo perjudicados en sus ingresos, servicios, ventas, producción y sobre todo en los compromisos asumidos en el mercado interno y externo. Siempre hemos valorado el sacrificio, compromiso, visión y aporte que hacen a la economía nacional.
7º Exhortamos también, a tener presente que la confrontación violenta es una trampa de quienes no aceptan vivir en democracia; a reconocer a sus compatriotas como ciudadanos con igualdad de derechos y oportunidades y aceptar que la viabilidad de nuestro país se expresa en la preservación de su independencia económica y su soberanía política sustentada en la “unidad en la diversidad”, que sólo es posible a través del Estado Plurinacional, por lo que el restablecimiento de la paz y armonía de los bolivianos y bolivianas, debe permitirnos reorientar nuestra mirada hacia un horizonte estratégico de prosperidad que sea acorde a las oportunidades que nos presenta el nuevo contexto regional y mundial.
8º La Dirección Nacional del Movimiento al Socialismo solicita nuevamente al hermano presidente Luis Arce Catacora y a su gabinete ministerial a la resolución pacífica de la conflictividad social generada en torno al Censo para restituir la armonía entre bolivianos y bolivianas neutralizando cualquier posibilidad conducente a la confrontación y a la violencia, en correspondencia al carácter de nuestra Revolución democrática y cultural.
¡La lucha sigue, Viva la Revolución Democrática Cultural!
La Paz, 01 de noviembre del 2022
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Fuente: DTV