Carlos Enciso fue observado por el canciller Francisco Bustillo pero el Frente Amplio pide que sea destituído
El canciller Francisco Bustillo observó al embajador uruguayo en Argentina, Carlos Enciso, por expresiones en una entrevista periodística. El contenido de sus expresiones se viralizó rápidamente por Twitter, y cayó muy mal dentro de las esferas del gobierno.
Además, el partido de la oposición le reclama a Luis Lacalle Pou medidas más fuertes que una carta formal para arreglar este asunto.
En concreto, el embajador puso en duda que se mantengan las inversiones extranjeras en Uruguay si el oficialismo no gana las elecciones presidenciales en 2024.
Las declaraciones hechas por el funcionario en un programa de la televisión estatal parecen ir contra todos los actos que el Estado uruguayo tiene hacía el exterior. Recordemos la última, Luis Lacalle Pou asistió a la asunción del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, con dos ex presidente, ambos de partidos políticos diferentes. Julio María Sanguinetti, quién fuera dos veces mandatario, y José Mujica.
Este gesto claro de unidad partidaria estuvo también cuando asumió la presidencia argentina Alberto Fernández. Y el entonces presidente del Frente Amplio, Tabaré Vázquez, asistiera a la ceremonia oficial con el presidente electo Luis Lacalle Pou.
La buena relación de los líderes políticos de diferentes partidos es un gesto casi único en la región. Y es señalado por especialistas como un símbolo de la estabilidad económica y financiera de Uruguay.
Los dichos en la entrevista
¿Cómo empezó todo esto? Enciso quedó en el ojo de la tormenta al ser entrevistado en el programa Quién es quién, de Canal 5. El embajador fue consultado sobre qué pasaría con los inversionistas si en las próximas elecciones no ganará el Partido Nacional.
“No dudo de que si cambia el signo, ojalá que no, haya gente que se replantearía las cosas”, había dicho el embajador en esa entrevista. En este mismo sentido apuntó: “El que está no se va a ir por un cambio de gobierno de forma automática, pero el que no está y puede venir por ahí orejea de otra forma y puede tener otros reparos”, apuntó”.
Enciso fue más allá y agregó: “No vamos a hacer futurología y profundizar en hipótesis de lo que puede pasar del 2024 para allá, pero evidentemente hay una tensión de la sociedad y el empresariado en general de cómo va a evolucionar nuestro país”.
El tirón de oreja del gobierno
La nota enviada por Bustillo queda muy lejos de colmar las aspiraciones del Frente Amplio, que había sugerido que el embajador debía ser removido de su cargo, según informa El País.
Además, Cancillería aún debe responder a un pedido de informes que le cursó el senador opositor Daniel Caggiani, perteneciente al Movimiento de Participación Popular, el sector de José Mujica dentro del Frente Amplio.
Caggiani, en diálogo con El País, había considerado que las expresiones de Enciso entraban en contradicción con la ley del Estatuto del funcionario del Servicio Exterior de la República, vigente desde diciembre de 2019. Allí se indica que el personal diplomático “está al servicio de la Nación, con entera independencia de personas, grupos o partidos”. También determina que el funcionario está para la función y se debe desempeñar con imparcialidad.
Caggiani sostuvo que las expresiones del embajador fueron muy graves y preocupantes y espera que el ministerio, junto con la debida explicación, le pide disculpas al Frente Amplio por esas declaraciones.
El sector pretende conocer “qué opinión le merecen las expresiones” a la Cancillería y solicitó que la valoración sea realizada “en el marco de la normativa vigente”, bajo el entendido que “no cumplen con el criterio de independencia respecto a grupos o partidos políticos”, según el texto del pedido de informes al que accedió Montevideo Portal.
Además, el Frente Amplio busca conocer si eventualmente la Cancillería determinó “alguna medida al respecto” y si la participación de Enciso en la entrevista televisiva contó con la autorización del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Fuente: Infobae – América Latina