En la imagen, el presidente de Brasil Lula da Silva y el ex presidente de Uruguay Pepe Mujica, en la vieja peta de Pepe, esta semana.
Esa peta celeste es su auto de siempre, no usó otro ni cuando fue presidente. Y no ocupó residencia oficial mientras gobernó Uruguay, se quedó a vivir en su casa de siempre con piso de tierra y abundante naturaleza en las afueras de Montevideo.
Se vive con plata. Pero qué feo vivir para la plata. Y qué bueno que haya ejemplos de esto, como este.
Fuente: Pepe Pomacusi Periodista
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