La despedida. Restaurante italiano de barrio, en Recoleta. Ningún turista. Los mejores sabores. Te sientes bien.
Pastas caseras, mariscos, un Rutini Cabernet Franc Malbec, el más auténtico Tiramisú, a un precio
increíble. Como si pidieras cuatro pollos, una soda y un helado.Vienen familias tradicionales, abuelos, hijos y nietos, se come rico, encuentras calidad, un ambiente espectacular y los mejores precios.
Porque viajar no tiene que ser gastar. Es conocer y aprender a disfrutar mucho con poco.
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Salud Claudia Pinto Banegas
Fuente: Pepe Pomacusi Periodista