“Hay que cuidar al hombre inmediato, al que no piensa. Por suerte no está en peligro”.
La frase enigmática, como no podía ser de otra manera, pertenece a José María Barbieri.
Resolví
conversar de modo inmediato con él…(Yo) ¿A qué se debe su flamante idea?
(José María) Bueno, lo que pasa es que estuve releyendo a Dostoievski, y confirmé que es un exagerado… Dice que en el siglo XIX se ha puesto en riesgo “al hombre inmediato, al hombre de acción”. Le preocupa demasiado la reaparición del hombre psicológico… Sugiere que es un hombre perplejo que amenaza la continuidad material de la vida…
(Yo) ¿Reaparición?
(José María) Claro, porque aunque pensar nunca estuvo de moda, no se puede descuidar que en el Renacimiento hubo también un aumento relativo de gente imprudente…
(Yo) Entonces, ¿Dostoievski exagera?
(José María) Por supuesto. Me parece que ni siquiera el siglo XXI supone un peligro para el que no piensa. En todo caso, soy optimista: creo que el uso inmediato de la tecnología lo puede consolidar aún más…
Fuente: Roberto Barbery Anaya.
