UNA
NOCHE EN
LA VIDA DE
PERCY.
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Mi amigo el periodista miraba las noticias pensativo.
Él sabía cómo se manejaba la agenda.
… Y también sabía que la agenda la marcaba el jefe de prensa, previa charlada con el gerente comercial del canal.
Nada…
No salía la nota.
Dos años antes, y luego de peregrinar como santo sin capilla, mi amigo el periodista sospechaba que todo quedaría en nada.
Entonces recordó…
El día que lo mandaron a cubrir un hecho, una denuncia sobre unos avasallamientos.
Un delito cometido en un lugar llamado Las Londras.
No tenía idea donde era, pero el vehículo del canal ya estaba encendido y esperando.
Listo, salieron.
Eso sucedió dos años antes.
Fue el día, el momento funesto en que un grupo de delincuentes y terroristas armados llamados «interculturales» lo secuestraron a punta de balazos, patadas y revolcones.
Pero…
No sólo a él.
Le hicieron lo mismo a otros colegas y a varios pacos.
Hubo denuncias, hubo batidas buscando a los responsables, hubo marchas de repudio y pronunciamientos.
Pero…
Los encargados de hacer justicia, no actuaban como se esperaba.
Hasta que…
Un día y bajo presión, la justicia atrapó a algunos de los terroristas.
Pero…
Resultó que estos tenían más poder e influencias que los pacos y la prensa.
Finalmente, Los cabecillas avasalladores de Las Londras quedaron libres e impunes.
No pasó mucho tiempo, para que los mismos «hermanos interculturales» fueran vistos en otras propiedades y con el mismo método.
Violencia, armas…
Mi amigo el periodista se agarró el cabello y murmuró impotente y casi llorando de bronca.
– «Dos años como si nada, y no pasa nada…»
-murmuró en tono resignado, mirando todos los noticieros.
No se mencionó el tema de Las Londras y si alguien lo hizo, «fue por aquí pasó».
– Definitivamente, todo se pudrió cuando la publicidad estatal le llenó la alcancía a los medios.
-pensó mi amigo el periodista.
Y finalmente…
Se cansó de esperar la nota que nunca salió.
Al rato se acostó y se durmió.
– Mañana será otro día.
-fue lo último en que pensó Percy, antes de cerrar los ojos.
Percy, mi amigo el periodista…
El ESCRIBIDOR.
Fuente: Párraga Jose – El ESCRIBIDOR