Dura derrota: evistas levantan los bloqueos y se van con las manos vacías En el inicio del vigésimo cuarto día de bloqu…

Dura derrota: evistas levantan los bloqueos y se van con las manos vacías

En el inicio del vigésimo cuarto día de bloqueos, el dirigente campesino afín al ala radical del Movimiento al Socialismo (MAS), Humberto Claros, anunció un cuarto intermedio en la medida de presión que inició un 14 de octubre cuando Evo Morales salía a la palestra para notificar al país que iniciaba el cerco nacional de carreteras y convocaba a todos los sectores sociales a sumarse a esa cruzada por la falta de atención del gobierno a la crisis económica que sumía a la población boliviana en una situación desesperante.

«Ninguna organización quiere cuarto intermedio y lo digo con mucho dolor, con pesar, con todo ese dolor que vamos a hacer una pausa con vigilia, vamos a levantar momentáneamente nuestros bloqueos; nos duele las traiciones, la indolencia, no estamos abandonando la lucha», informó el abatido dirigente campesino evista, quien arremetió nuevamente contra el mandatario Luis Arce y el gobierno en su conjunto por haber acometido contra las que consideró genuinas protestas sociales.



Sin embargo, la protesta tenía solamente una intención y era presionar al gobierno y a las autoridades judiciales a desistir sobre la posible aprehensión del exmandatario a quien la Fiscalía Departamental de Tarija le sigue un proceso por trata de personas y estupro agravado; sin embargo, en el transcurso de la movilización, los sectores movilizados enarbolaron esa bandera de carácter económico y político, que pasaba por la atención al alza de la canasta familiar y la falta de provisión de dólares y combustible.

Si bien la protesta inició con tan solo dos regiones cercadas, el trópico de Cochabamba y el Valle Bajo de ese departamento, el autodenominado Estado Mayor del Pueblo aseguraba que la medida iba a ser masificada y multiplicada en el paso de los días, hecho que no ocurrió en los 23 días de bloqueo; además, sumaban otras peticiones de orden político: el reconocimiento del fallido X Congreso Ordinario del MAS, que se desarrolló en la población de Lauca Ñ en octubre de 2023 y la habilitación de la candidatura de Morales para las elecciones generales del próximo año.

En ningún momento, los bloqueos se expandieron más allá del área de influencia del líder de las seis federaciones del trópico de Cochabamba, ya que, en el momento más álgido de la protesta, horas después de que el propio Evo Morales denunciaba haber sido víctima de un supuesto intento de asesinato, los sitios se incrementaron a 25 frente a los 23 que se mantuvieron en la mayor parte de las semanas que duró la medida; es más, solo cuatro departamentos respondieron a la consigna evista: Cochabamba, donde se concentró la mayoría de los puntos, Santa Cruz, que llegó a tener tres; Potosí, dos y Oruro, tres.

La primera derrota de Morales fue esa, los bloqueos del ala radical del MAS tuvieron su propio cerco, porque no pudieron propagarse a los otros departamentos los cuales, evidentemente, fueron afectados por el corte de las vías que son parte de la red fundamental de carreteras, pero que mostraron que el área de influencia del exmandatario se redujo a Cochabamba y a algunos puntos focalizados de otros tres departamentos.

Inician bloqueo en ruta Santa Cruz – Cochabamba contra el proceso a Evo MoralesEn Santa Cruz, hubo dos puntos de bloqueo. Foto: Red UNO

Ante la impasividad del gobierno, el Pacto de Unidad arcista intentó radicalizar la medida mediante el llamado a la efervescencia de sus bases diseminadas en esas regiones, si bien la radicalización de los bloqueos provocó que en las diferentes urbes se incrementen aún más los precios de los productos esenciales de la canasta familiar y se agrave la crisis del combustible, creció el rechazo de la población a la medida evista, elemento que dio un campanillazo al líder cocalero sobre el efecto bumerang de su medida, el 1 de noviembre decidió pedir un cuarto intermedio y declararse en huelga de hambre.

La determinación de Morales fue la supuesta respuesta al inicio del desbloqueo en la localidad de Parotani, en la que policías y militares iniciaron un operativo que terminó con la limpieza de ese tramo que permitió retomar el tránsito de Cochabamba hacia el occidente del país; sin embargo, la protesta dio un giro y mostró la parte más belicosa de los acólitos del expresidente los cuales tomaron tres unidades militares acantonadas en el trópico de Cochabamba, además de tomar más de 200 uniformados como rehenes.

Esas tomas y la respuesta agresiva a las labores de despeje de las fuerzas combinadas provocaron el rechazo generalizado de la población incluso de los lugares en los que estaban instalados los cercos; en Parotani, Cochabamba, grupos productores aplaudieron la decisión; en Mairana, Santa Cruz, los uniformados ingresaron a es municipio en medio de los aplausos de los habitantes; el cansancio era evidente; el martes, Morales y su dirigencia recibieron otro golpe, campesinos de Totora y Tiraque anunciaban su salida de la movilización.

Si bien Morales reiteró su petición a sus bases de declarar un cuarto intermedio, la medida languidecía, la pasada jornada ya eran solamente doce los puntos de bloqueo, todos en Cochabamba. Al final, el denominado Estado Mayor del Pueblo determinó el cese de la medida sin haber logrado ni uno de los objetivos trazados, se van con las manos más vacías, porque la afectación a la economía del país repercutirá en sus propios seguidores, habida cuenta que los efectos reales de la medida se verán en el mediano y largo plazo.

Vía : Eju.tv

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Fuente: DTV