El 10 de noviembre de 2019, a 21 días del fraude electoral denunciado por la OEA y de la protesta pacífica del pueblo en las calles, huyeron al Chapare y renunciaron, Evo Morales y Álvaro García Linera

El 10 de noviembre de 2019, a 21 días del fraude electoral denunciado por la Organización de los Estados Americanos (OEA) y de la protesta pacífica del pueblo de Bolivia en las calles, huyeron al Chapare y renunciaron a la Presidencia y a la Vicepresidencia de Bolivia, Evo Morales y Álvaro García Linera.

Como una de los millones de bolivianos indignados y 2ª Vicepresidente del Senado, me encontraba en las calles, junto a mi pueblo, unida a la protesta pacífica contra el megafraude mientras la violencia del MAS, instruída por Evo Morales, atacaba a civiles.

A cinco años de esa fecha histórica, celebro con orgullo la valentía cívica y el sacrificio personal del pueblo boliviano.



Muchos me apuntan como una Presidente que no hizo lo que debía respecto a la sigla del MAS y la impunidad de Evo Morales. Quiero decirles que cumplí mi deber y ese deber es el que confiere la Constitución al Presidente:

1. Designé al Vocal del Tribunal Supremo Electoral y es este Órgano Electoral el responsable de la legalidad de los partidos políticos.

2. El Ministerio Público y el Tribunal Supremo de Justicia tienen la obligación de oficio de enviar a la Asamblea Legislativa Plurinacional el pliego acusatorio para tramitar la aprobación del #JuicioDeResponsabilidades que debió instaurarse contra el autor intelectual del fraude electoral y los autores materiales del mismo, así como de todos los delitos cometidos en funciones de Evo Morales.

Eso es lo que corresponde en DEMOCRACIA pero con un Fiscal General sometido al MAS, con Evo Morales prófugo en México y Argentina y una Asamblea Legislativa Plurinacional compuesta con 2/3 de masistas, eligieron la impunidad de sus dirigentes.

En 2025, con el cambio de gobierno y el retorno de la DEMOCRACIA los delitos imprescriptibles como la violación a la Constitución por fraude, por reelección indefinida, por traición a la Patria, por alzamiento armado, etc. etc. serán juzgados.

La Historia los condena como los mayores cobardes, impostores e instigadores de la violencia y la confrontación.

Muy pronto, será Justicia.

Fuente: Jeanine Añez