Contratos de litio: ¿un negocio para Bolivia o para extranjeros?
La diputada Mónica Torres, quien instaló una huelga de hambre en el hemiciclo de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP), ha exigido la anulación de los contratos de litio firmados con las empresas Uranium Group de Rusia y CBC de China, calificándolos como un “negocio redondo” para intereses extranjeros.
Mientras tanto, el gobierno anunció que iniciará la socialización de estos contratos en todo el país a partir de la próxima semana, comenzando por Potosí, en un intento por garantizar transparencia y consenso.
Torres, durante en el programa Detrás de la Verdad, denunció que los contratos son desventajosos para Bolivia. “No es un contrato, es un negocio redondo para los chinos. El 78% de las ganancias se las llevan ellos, y Bolivia solo se queda con el 22%”, afirmó. La diputada criticó que el gobierno no haya socializado adecuadamente los contratos antes de su tratamiento en la ALP y, aunque ahora se haya paralizado el proceso para socializarlos, insiste en que lo correcto es anularlos por ser “lesivos para el Estado”.
Por su parte, el viceministro de Energía Alternativa, Álvaro Arnez, defendió los acuerdos y aseguró que representan una inversión de más de $2 mil millones para el país. “Con mentiras buscan defenestrar estos contratos. La planta de litio, que demorará tres años en construirse, generará importantes beneficios económicos para Bolivia”, declaró. Arnez también reconoció que en Potosí hay “personas extremistas” que se oponen a la socialización, pero destacó que muchas otras están dispuestas a escuchar los detalles de los contratos.
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Fuente: DTV