En un cabildo desarrollado este viernes en Llallagua, norte de Potosí, la población declaró persona no grata al expresidente Evo Morales, a quien responsabilizan por los bloqueos y hechos de violencia registrados en la región. Durante la reunión, también se solicitó la renuncia del alcalde Adalid Aguilar y de sus concejales, señalados como responsables por la falta de apoyo durante la crisis.
Los pobladores relataron haber vivido momentos de tensión y temor por las restricciones impuestas durante los días de conflicto, por lo que aprobaron resoluciones como la solicitud de instalar un cuartel militar permanente, declarar el 12 de junio como el Día de la Dignidad Llallagüeña y pedir sanciones para los autores de los disturbios. Asimismo, se pidió a los comerciantes mantener precios justos en apoyo a las familias afectadas.
El cabildo también rindió homenaje a los tres policías que fallecieron mientras cumplían su labor en las labores de desbloqueo, declarándolos “héroes y mártires” de la región. Entre otras determinaciones, se prohibió el ingreso de vehículos indocumentados y la venta de combustible en bidones, además de solicitar al Gobierno nacional garantías para preservar la paz y seguridad en la zona. Los asistentes exigieron, además, la renuncia del Defensor del Pueblo tras su visita en medio de la crisis.
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Fuente: Periodismo Somos Todos