Otra cosa es con el pueblo. Lara convoca a sus seguidores, quiere decirles gracias. Quiere abrazarse con ellos.
Está feliz por su juramento oficial, ese que se hace con todas las pompas y todos los formalismos, con solemnidades y juramentos.
Pero él quiere celebrar también con su gente, con los que creyeron en Rodrigo y en él, con los que vencieron al silenciamiento de sus ideas en los grandes medios, con los que derrotaron a los números de las encuestas, con los que les ganaron a los cierres de campaña llenos de grandes pantallas, shows de música, luces y papel picado inundándolo todo.
Lara convoca a los que ayudaron a ganarle a los asesores millonarios, a la guerra sucia, a los que hacían desfilar denunciantes por sus sets de televisión para demostrar que Lara era lo peor, que maltrataba a personas mayores, que no pagaba deudas, que era un poderoso que vivía en el Urubó y comía en Bistecca.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
Lara quiere abrazarse con los que los ayudaron a Rodrigo y a él a derrotar a los que los excluían de sus debates, a los que les decían que eran mal binomio, un peligro para Bolivia, unos zurdos, socialistas y masistas.
Y está bien, tiene derecho a festejar, celebrar y abrazarse.
Pero ahora toca mirar hacia adelante, hacer que el abrazo sea entre todos, que nadie quede excluido, que el futuro sea mejor para todos.
Y, claro, si hay alguna deuda pendiente puntual, si fue desafiado a actuar si ganaba, que haga lo que le toca.
Y siga para adelante, pensando en todos y que Rodrigo y él gobiernen para todos, que para eso han sido elegidos y en ellos está ahora la esperanza de Bolivia, Bolivia, Bolivia, Bolivia, Bolivia. La patria 🇧🇴!
https://www.facebook.com/video.php?v=1312360004269648
Fuente: Pepe Pomacusi Periodista
