la justicia ordenó al Instituto Boliviano de Metrología (instancia dependiente del Gobierno) buscar laboratorios independientes para que realicen estudios científicos sobre la calidad del agua potable.
Mediante una audiencia de acción popular, la Sala Constitucional Primera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, concedió la tutela a la Defensoría del Pueblo para que se realicen estudios científicos sobre la calidad del agua potable que es distribuida a los hogares.
Con esta determinación, la justicia ordenó al Instituto Boliviano de Metrología (instancia dependiente del Gobierno) buscar laboratorios independientes para que realicen estudios científicos sobre la calidad del agua potable en un plazo de 72 horas.
“Efectivamente se ha adoptado la decisión que, en el plazo de 72 horas se pueda designar a los laboratorios que puedan hacer la valoración de estos parámetros”, informó el jefe de la unidad de Derechos de la Defensoría del Pueblo, Luis Fernando Cuellar.
Por su parte, el interventor de la Empresa Pública de Agua y Saneamiento (Epsas), Jaime Gutiérrez, argumentó que los estudios realizados al agua potable son garantizados y que cuentan con todas las certificaciones.
”Somos el único laboratorio garantizado y certificado de todos mis equipos y laboratorios que tenemos”, dijo el interventor.
En dicha audiencia se citó al viceministro de Promoción, Vigilancia Epidemiológica y Medicina Tradicional, Max Enríquez; a la directora ejecutiva de la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Agua Potable y Saneamiento Básico, Karina Ordóñez; al interventor de la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (Epsas), Jaime Gutiérrez y, al director del Servicio Departamental de Salud, Adrián Ascarrunz.
Además, se invitó a la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) instancia que elaboró un estudio sobre la calidad del agua potable en La Paz.
Hace dos semanas, la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) presentó un informe final sobre el Monitoreo de Calidad de Agua Potable en las Redes de Distribución de la ciudad de La Paz en el que detallan los riesgos de consumir agua directamente del grifo.
En el estudio se detectó la presencia de microorganismos como la bacteria E. coli, y los parásitos Yardia y amebas, que no deberían estar presentes en el agua potable, pero por distintos factores se han vuelto resistentes a los métodos de tratamiento.