La situación actual con la calidad del aire es preocupante, y es crucial abordarla de manera efectiva. El Ministerio de Medio Ambiente ha considerado la posibilidad de abrogar la ley incendiaria 741, pero la aprobación se ha visto obstaculizada recientemente. José Maldonado Gemio, diputado de Carlos Mesa, se opuso a su aprobación, exigiendo que pase a comisión y que se declare previamente desastre nacional.
Sin embargo, la comisión a la que fue derivado carece de representación desde hace dos semanas. En una sesión con 130 diputados presentes, solo 4, incluido un masista, respaldaron la moción de aprobar directamente con una salvaguarda contemplada en el artículo 174 del reglamento, permitiendo la dispensa hasta el reglamento interno.
Es lamentable que, a pesar de la importancia de garantizar un aire limpio como un derecho humano fundamental, la política y los acuerdos entre Evistas, Camachistas (salvo algunas excepciones) y Mesistas, esté prevaleciendo sobre la salud de nuestra comunidad y el deterioro del medio ambiente. Ya se vió dicho acuerdo antes, en la elección de la Presidencia de la cámara de Senadores y se ve ahora, nuevamente, en el afán de que el país se siga incendiando@n do. La necesidad de abordar esta problemática de manera urgente es evidente, considerando los impactos en la salud y la biodiversidad. La población tiene que exigir la abrogación de la ley 741 a sus respectivas representaciones parlamentarias.
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