Mil machetazos en el el mar, un millón de machetazos en el mar, mil millones de machetazos

Mil machetazos en el el mar, un millón de machetazos en el mar, mil millones de machetazos en la inmensidad del mar, no hacen ninguna diferencia. Sé inteligente, siempre.

Nunca es la rabia, nunca es el odio, nunca es la envidia, siempre es la inteligencia la que gana.

Recuerda siempre, sé inteligente. Y enseña a tus hijos a ser inteligentes. Construye ganadores, no ociosos envidiosos. Los inteligentes triunfan y son felices. Los envidiosos son frustrados y no alcanzan estados de felicidad.



Consejo dominical.

Fuente: Pepe Pomacusi Periodista