Le preguntaron en una entrevista a Andrónico qué consejo le daría a Evo. “Mayor humildad”, dijo Andrónico.
Y Loza sale con buzitos y chinelas, como factor de medición de humildad.
Loza cree que la humildad se mide en ropa y zapatos.
Y se olvida de cosas como “no aceptar que nadie me contradiga”, “yo y solamente yo”, “quedarme 30 años en un cargo y taponear liderazgos” o “contratarme un locutor que me pregunte lo que quiero y solo hablar con él, para que me adule y me diga sí, sí, sí”.
Ahí se mide la humildad mejor que en un par de chinelas o en un par de Land Cruisers o un par de Lexus.
Su entorno hundirá o ayudará a Evo. Evo debe darse cuenta. Cómo se da cuenta el país.
Fuente: Pepe Pomacusi Periodista