Nuevas revelaciones salpican aún más el caso de Lilibeth Coímbra, la activista aprehendida por el presunto biocidio de cuatro perros. Una conversación de chat, supuestamente entre ella y su madre, fue filtrada y ha causado revuelo por el contenido que sugiere la intención de deshacerse de los animales, considerados peligrosos y una molestia dentro del hogar.
En los mensajes, Coímbra habría expresado que los perros no le permitían ni recibir visitas y que intentaron regalarlos, pero nadie los quiso “por feos”. La parte más comprometedora del intercambio sería la frase donde presuntamente afirma que comprará veneno para eliminarlos en un día lluvioso, esperando que dos familiares no estén en la casa donde estaban los animales.
Aunque el entorno de Coímbra insiste en que se trata de un montaje con fines políticos, el contenido del chat refuerza la acusación y complica su defensa. La investigación sigue en manos de Pofoma, mientras el caso toma dimensiones mediáticas y políticas cada vez más intensas.
Fuente: Periodismo Somos Todos