Y VUELVE A SUCEDER… ¿Y ahora como lo explican? No. No lo explican. Lo niegan. Del modo …


Y
VUELVE
A
SUCEDER…
¿Y ahora como lo explican?

No.
No lo explican.
Lo niegan.
Del modo más cínico y mentiroso lo niegan. Ahora, resulta que el vecino de La Guardia es el que tiene armas y agentes químicos.
Ahora resulta que es el vecino quien ataca a los pobres e indefensos pacos.
Y mas lejos…
Los vikingos encapuchados que esconden su fea cara, el otro mil defectos que amenaza con puñetes al gobernador, los otros vikingos, los que según ellos traerán sus ponchos rojos para poner orden y los vikingos mineros que amenazan con dinamita son los buenos…
A esos nadie los acusa de incitar el odio y la violencia.
Y no faltan los imbéciles que los defienden y justifican…
Tan perversos, resentidos y odiadores como ellos.
Pero no son los únicos:
También aquí tenemos nuestros propios resentidos, vendidos y odiadores.
Y no hay drama.
Ya los tenemos identificados.
De esos nos ocuparemos luego.
Y mientras…
Otra tropa de vikingos viene desde San Julián. Armados, encapuchados y dispuestos a todo.
¿Y que buscan?
Muertos.
Eso buscan.
¡Quieren muertos!
Y no se harán problemas en templar a alguno de ellos, para luego victimizarse.
Y por supuesto.
Cargar los muertos a los CRUCEÑOS.
Y entonces, entrarán en escena los jueces y fiscales, aplicando una «justicia implacable» contra los asesinos «de gente humilde» que «solo pedía trabajar»
Y entonces, la «institución del orden», el «glorioso verde olivo» será más eficiente que nunca en la búsqueda y captura de los mencionados asesinos…
Ya conocemos el absurdo pero eficiente libreto.
Ya pasó en Senkata, Sacaba y otros sitios.
Y bueno puej.
Definitivamente estamos solos en esta lucha.
Una pelea por censo y DIGNIDAD que no tendría por qué ser una pelea.
No hay problema.
Estuvimos solos en las luchas cívicas, nuestros abuelos se las batieron solos, peleando el 11% de las regalias petroleras de las cuales los ocho mirones de palo comen.
Un último recado para los que vienen a «poner orden».
Vayan olvidando eso de «es ley del cruceño la hospitalidad»
Y algo más:
Traigan muchos sartenes…
¡Porque aquí, lo que más tenemos son huevos!

El ESCRIBIDOR.
Pd/
Los vikingos mencionados en realidad son collas, pero mejor llamarlos vikingos, porque cuando se les llama collas se enojan.



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Fuente: Párraga Jose – El ESCRIBIDOR