Bono Juancito Pinto: 16 años incentivando a las familias de bajos ingresos

Se trata de un bono de Bs 200 para los estudiantes. Foto: Archivo.

Bono Juancito Pinto: 16 años incentivando a las familias de bajos ingresos

La Paz, 06 de noviembre de 2022 (ABI). – Con el pago del Bono Juancito Pinto, este 2022 se cumplen 16 años de la entrega del incentivo a estudiantes en edad escolar con el objetivo de recudir la deserción escolar.

El incentivo económico es de gran impacto principalmente en familias con bajos recursos porque representa “una ayuda” en los gastos del estudiante.



El lunes 24 de octubre se inició el pago del bono en todo el territorio nacional para beneficiar a 2.316.385 estudiantes de primero de primaria hasta sexto de secundaria de unidades educativas fiscales, de convenio y centros de educación especial de los nueve departamentos del país. Para ello se garantizó el desembolso de Bs 473.470.000.

En la inauguración del pago del bono en el municipio de Warnes, Santa Cruz, el presidente Luis Arce destacó que además del objetivo de reducir la deserción escolar, este beneficio tiene el propósito de redistribuir la riqueza, al igual que otros pagos sociales.

Esta redistribución de las utilidades de las empresas del Estado, que aportan los recursos para este y otros bonos sociales, se entregan a partir del modelo económico social comunitario productivo, para beneficiar principalmente a los sectores de menores recursos.

Así lo reafirman anualmente los mismos estudiantes que cada año reciben el monto de Bs 200 del bono.

“El primer año que he recibido me he sentido alegre porque yo vivía en el campo y salíamos acá, cada fin de año veníamos a la ciudad a comprar cosas. Cuando era niña me sentía feliz y emocionada al recibir el bono”, explicó una estudiante que recibió el incentivo por 12 años consecutivos en la provincia Larecaja de La Paz.

La madre de la estudiante confirmó la alegría que sentía cada año su hija, desde pequeña, al recibir el bono. “(Mi hija) me decía que con el dinero se comprará una mochila, cada año esperaba el bono pensando en comprar su lista de útiles escolares”.

Según estudiantes que recibieron el incentivo por más de diez años, y que llegaron a la última gestión de colegio, el monto es considerado “una inversión” en su formación educativa y coadyuva en que concluyan la educación primaria y secundaria, lo que da pie a que luego prosigan con una carrera universitaria o técnica.

“El primer año pensé en comprarme juguetes y ropa, pero realmente se invierte en materiales escolares y parte del uniforme para el colegio”, dijo otra estudiante que recibía el bono por último año.

Entre el año 2007 y 2021, el pago del Bono Juancito Pinto logró la reducción de la tasa de abandono escolar del 3,38% al 1,22% respectivamente, en el nivel primario; y en el nivel secundario, de 4,81%, registrado en 2014, a 3,78% en 2021.

El apoyo no solo es de gran ayuda para el estudiante, sino para todo el núcleo familiar, ya que el gasto que se hace en los materiales escolares implica un monto que la familia no erogará de sus propios ingresos y podrá usar el mismo en otras necesidades del hogar.

“Hasta primaria mi papá me compraba ropa, cobraba el bono y él me lo guardaba y luego compraba lo que necesitaba; cuando ya estaba en secundaria me compraba, a veces, algún mueble o me ahorraba para luego aumentar con otro monto y comprar algo más caro”, explicó otro estudiante de último año de secundaria de una unidad educativa en la ciudad de El Alto.

En el caso de los estudiantes de primaria, las madres relatan que para el día del pago del bono, los menores no pueden conciliar el sueño por la emoción. 

“Mis hijos no duermen, dicen ‘voy a tener mi bono’, se levantan a las 06.00 de la mañana”.

Además de los menores, las madres también expresan su alegría por obtener un apoyo para sus niños. “Estoy feliz, decirle gracias al Gobierno por esta ayuda que nos da”, señaló otra entrevistada.

El Ministerio de Educación informó que este año se priorizará el pago del beneficio a estudiantes de áreas rurales de difícil acceso, en coordinación con las Direcciones Departamentales y Distritales de Educación, y los directores de unidades educativas.

De acuerdo con el Gobierno, el desembolso de recursos para el pago del bono, Bs 473 millones, es una inyección a la economía nacional porque una vez pagados ingresan directamente en el mercado interno, logrando el movimiento de distintos sectores económicos.

“El bono es una prueba de la reactivación económica, inversión pública y estabilidad económica gracias al modelo sociocomunitario productivo”, destacó el ministro de Minería, Ramiro Villavicencio, durante la inauguración del pago, en Oruro.

Este año, el pago se realizará hasta el 3 de diciembre, a través de un cronograma establecido por el Ministerio de Educación, en 55 entidades financieras en todo el país.

Solo el Banco Unión habilitó 176 agencias en los nueve departamentos para el pago del Juancito Pinto. La entidad recomendó a los padres de los beneficiarios que antes de acudir a los puntos de pago, verifiquen su registro en la página web del Ministerio de Educación, porten la cédula de identidad y una fotocopia simple de la misma, como único requisito.

El cronograma para el pago establece que, del 24 al 30 de octubre, cobrarán los tutores con las terminaciones de carnet con 1 y 2; del 31 de octubre al 6 de noviembre las terminaciones 3 y 4; del 7 al 13 de noviembre las terminaciones 5 y 6; del 14 al 20 de noviembre con 7 y 8; y del 21 al 27 de noviembre, las terminaciones 9 y 0.

A partir del 28 de noviembre no habrá restricciones de numeración de cédulas de identidad para el pago.

El bono Juancito Pinto fue implementado mediante Decreto Supremo N° 28899, de 26 de octubre de 2006; ese año se pagó a 1.084.967 estudiantes.

Este incentivo es parte del grupo de bonos sociales entre los que está el Juana Azurduy de Padilla, dirigido a mujeres gestantes y madres de niños menores de dos años, y la Renta Dignidad que se paga anualmente a adultos mayores de más de 60 años. En todos se beneficia principalmente a las familias de menores recursos económicos.

CV/FB


Fuente: ABI