Diego Von Vacano próximo al entorno de campaña para hacer contactos, disfrazado de experto en el impacto del Covid en el mundo, se autoproclama asesor “ad honorem” del presidente Arce.
Sus redes son muy emotivas, publica una y otra vez una foto que logra en la Casa del Pueblo en la posesión presidencial y en visitas informales en reparticiones de gobierno. Su objetivo, mostrar al mundo que tenía lazos con el poder.
¿Para qué? resulta que este personaje, de ser profesor de ciencia política, se convierte en un experto en el litio y comienza a perseguir sus apetitos personales, logrando ser representante de la empresa Energy-X, así lo certifica en sus redes, y entonces se proclama sin nombramiento, asesor del actual gobierno boliviano, pero también representante de una empresa estratégica del litio.
Esos detalles no importaban, porque debía mostrarles a sus jefes, Evo Morales, y el dueño de la empresa a la que representa, Egan Teague, que él lograría el monopolio del oro blanco. Así lo muestra en un artículo del New york Times, e incluso logra que el potentado Teague, se traslade a Uyuni asumiendo que ya tenía el contrato.
Su gran problema es que por llegar tarde en la etapa final de selección Energy-X queda descalificada del proceso por incumplir el plazo de entrega de su propuesta.
En ese momento, Von Vacano debe manejar su frustración de perdedor. De ser autonombrado asesor y simpatizante del gobierno de Luis Arce, se convierte en su opositor, iniciando una campaña de desprestigio al proceso de selección del Litio y el plan soberano de negocios para la industrialización.
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Fuente: DTV
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