Agradezco a los dueños del sentido de moral de la Cruceñidad (la que se mueve solo para alcahueteríos de la gente adinerada o poderosa) que se tomaron la molestia de hacerme llegar por medio de amistades los estados financieros del Banco Fassil, pero le pelaron al gajo si creyeron que alguien puede influir en mi criterio.
Lo único que me interesa del #BancoDifissil es que “NO” VULNERE EL DERECHO DE LOS AHORRISTAS de DISPONER DE SU DINERO cuando lo necesiten, nada más.
Los papeles pueden decir lo que quieran, sabemos como funciona la corrupción en este país (tanto en lo público, como en lo privado), pero esto es como en el cacho: “LO QUE SE,
VE SE ANOTA” y #BancoFassil está cometiendo muchas presuntas ilegalidades y atropellos, sin freno ni fiscalización alguna; ocasionando irreparables daños a un gran colectivo de la ciudadanía (nosotros sus clientes), con total impunidad.
La FIDELIDAD no funciona de manera unidireccional.
Fuente: Nadia Beller