Sobre todo en una región como América Latina, donde las instituciones suelen ser demasiado débiles por tradición, los motivos principales para internacionalizar activos y tenerlos a salvo es el riesgo político, el riesgo cambiario, bancario o los tres de manera simultánea, que suele ser lo más común. Una vez que el componente más líquido de un patrimonio personal o familiar muy importante se encuentra a salvo en una jurisdicción distinta de aquella en la que reside, se ha dado un paso muy importante en la dirección correcta. Sin embargo, el trabajo no ha terminado, porque existen otros riesgos.
Uno de los problemas más importantes ahora mismo en el mundo, sobre todo como consecuencia de todos los experimentos económicos y políticos impuestos alrededor de la pandemia del Covid-19, es la inestabilidad política y económica y la volatilidad en los mercados de capitales.
Esto obliga a los clientes a seguir planificando la protección de sus ahorros de largo plazo y los de su familia con estos elementos en cuenta, que eventualmente podrían traducirse en problemas todavía mayores, como una nueva recesión global y todo lo que aquello implica. Tal vez algunos eventos como guerras de mayor magnitud que la de Ucrania, revoluciones en los países más capitalizados, depresiones económicas, catástrofes ambientales y cualquier conflicto regional no son ahora mismo lo más probable, pero son posibles.
Inversores conocidos y reconocidos a nivel mundial, como Stanley Druckenmiller o Ray Dalio, afirman respectivamente que el aterrizaje forzoso de la economía -entendido como una recesión- de Estados Unidos está asegurado, y que podría llegar tan pronto como en lo que resta de 2023, o que incluso, luego de haber cubierto cinco siglos de historia en su libro más reciente, el mundo se enfrenta a un nuevo orden, así como toda economía responde a distintos ciclos, y hay que estar preparados.
Una estrategia elaborada de la manera más adecuada posible implica establecer varias posiciones y distintas ponderaciones en una cartera correctamente estudiada, y lo más recomendable es que uno de sus componentes más importantes sea el de metales preciosos, como el oro y la plata física, sobre todo como un seguro de largo plazo y no necesariamente como un elemento especulativo.
De igual manera, para asegurarse de que la inversión en metales preciosos es segura, resulta imprescindible trabajar en jurisdicciones con sólida institucionalidad y contar con empresas de renombre internacional. Este es el caso de Elementum International AG, con sede en los Alpes centrales de Suiza, uno de los lugares más seguros de Europa y el mundo.
Además de que Elementum garantiza que el metal precioso que compra, vende, guarda y custodia con las normas de seguridad más estrictas, sea de la mayor calidad posible, ofrece bajas comisiones y garantiza liquidez en casos de emergencia, con las siguientes características:
- Los metales preciosos se almacenan en Suiza, en el macizo de San Gotardo
- El cliente es propietario al 100% de los bienes almacenados
- La mercancía está asegurada contra todos los riesgos asegurables, incluido el robo
- Se almacena en un depósito de alta seguridad
- La mercancía puede venderse o enviarse al cliente en cualquier momento
- El inventario lo realiza el auditor internacional BDO
- Todas las barras son de calidad LBMA, y las suministran Umicore y Heraeus
Finalmente, Elementum también ofrece asesoramiento a sus clientes en la compra de metales preciosos con una estrategia de switching. Como la relación entre los precios del oro y la plata fluctúa, a veces es más barato comprar plata y a veces más barato comprar oro. Al cambiar la plata por oro y viceversa, la cantidad de metal precioso en la bóveda aumenta a lo largo de los años y las ganancias son significativamente mayores que si sólo se conserva un metal precioso.
Solamente como una pista de las estrategias de inversión más atractivas que Elementum International AG ofrece, si se requiere una inversión barata en plata física, Elementum compra lingotes de 15 kilos, lo que abarata los costes, pero además los almacena en depósitos aduaneros, lo que ahorra el 21% de IVA que normalmente se aplica a la plata.
Si necesita incorporar la inversión en metales preciosos para asegurar la parte más importante de su patrimonio y el de su familia a largo plazo, esta es una de aquellas oportunidades que no siempre se presentan, y que hoy no puede dejar de aprovechar.
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