Fiscalía imputa al dueño de night club Luxos por trata y explotación sexual de ciudadanas paraguayas

La Fiscalía Especializada en Delitos de Violencia Sexual y en Razón de Género presentó de manera formal una imputación contra el empresario Rubén J.R.Q., propietario del night club Luxos Vip Level Club, ubicado en el segundo anillo y avenida Roca y Coronado, por delitos de trata de personas con fines de explotación sexual comercial, ante denuncias de ciudadanas de nacionalidad paraguaya que llegaron de su país a trabajar como damas de compañía, quienes se sintieron vulneradas y ultrajadas en sus derechos.

El fiscal Saúl Balcázar, que llevó adelante las investigaciones, pide la detención preventiva del empresario por un tiempo de 180 días en la cárcel de Palmasola, por considerar que existen los suficientes elementos de prueba de la comisión del delito de trata de personas.

La imputación ya radicó en el Juzgado Tercero Anticorrupción y Contra la Violencia de la Mujer, a cargo del juez Roberto Parada, que tendrá que fijar hora y fecha para la audiencia. La Fiscalía adjuntó informes y testimonios de las damas de compañía paraguayas sobre cómo transcurría la vida de ellas dentro del local.



El night club Luxos Vip Level permanece intervenido y precintado por la Fiscalía Anticorrupción desde el 8 de julio, luego de las denuncias formuladas por las extranjeras que se sintieron utilizadas, ultrajadas, no solo por trata y tráfico de personas con fines de explotación y comercio sexual, sino por la presunta evasión del pago de impuestos, al haberse detectado que el propietario supuestamente colocaba el NIT de su local a nombre de las extranjeras para evitar controles de sus movimientos económicos.

Entre los fundamentos, la Fiscalía expone que en diciembre de 2020 una joven mujer paraguaya denunció a Rubén J.R.Q. por trata de personas con fines de explotación sexual y otros.

La mujer señaló que vino a Bolivia en busca de una amiga que trabajaba como modelo de lencería y de esa forma conoció al denunciado dueño de Luxos y empezó a trabajar de dama de compañía.

La víctima manifiesta que el ahora denunciado no la dejaba salir a la calle a ella y a sus amigas, tres coterráneas. Además, que era agresivo y no las dejaba descansar, tampoco les proporcionaba buena alimentación.

La Fiscalía presentó ante el juez informes de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de que, según las víctimas, el dueño del club estaría en poder de los documentos personales de las mujeres, como carné de sanidad, pasaporte y otros.

Asimismo, las extranjeras denunciaron que todos sus documentos quedaron retenidos en dicho club para que no trabajen en otro local nocturno y se vieran imposibilitadas de regresar a su país. También denunciaron amenazas y malos tratos por parte del denunciado, quien supuestamente, no las dejaba retirar sus pertenencias personales y no les pagaba el servicio que prestaban a los clientes.

Más revelaciones
En la fundamentación la Fiscalía hace revelaciones de testimonios de cómo transcurría la vida de las extranjeras en el interior del club. Una señala que llegó al país el 27 de noviembre de 2020, por invitación de una coterránea amiga que le cubrió los gastos de pasajes y otros.

En Santa Cruz conoció al propietario denunciado y a su hermano, quienes le indicaron que el trabajo en el club era desde las 20:00 hasta las 04:00 de la madrugada.
Afirmaron a las autoridades de la Policía y la Fiscalía que no tenían derecho a salir y eran obligadas a permanecer sentadas en el salón del club y que en caso de salir eran pasibles a multas. “No nos respetaban las horas de descanso, de haber un cliente después de las 04:00 de la mañana el personal del local nos despertaba”.

Otra paraguaya revela que una amiga, que anteriormente trabajaba en el lugar, le dijo que podría ganar dinero en Bolivia y por la necesidad y la acumulación de deudas se vio obligada a buscar trabajo aquí.

Se vino del Paraguay a inicios de noviembre de 2020 con otra amiga. «Nos contactamos con el dueño y nos dijo que teníamos que decir que veníamos como turistas», y refiere que este les explicó que del consumo de bebidas alcohólicas ganarían un porcentaje y esto dependería del precio del trago.

La víctima manifiesta que el horario de trabajo era inestable sobrepasando los horarios de las 04:00 de la madrugada, haciéndole trabajar hasta las 06:00 de la mañana y había noches que nada ganaban.

Eran modelos
Otra trabajadora registra su testimonio en la Fiscalía. Dice que en su país era modelo de prendas de vestir y que, con ese trabajo sustentaba a sus hijas, pero decidió venir a Bolivia para trabajar de modelo y era la primera vez que dejaba a sus hijos.

La víctima manifiesta que se agotó por los horarios de trabajo y que se incumplían por parte del empleador. Ante estos abusos decidieron abandonar el local, pues los horarios que deberían cumplirse desde las 20:00 hasta las 04:00 de la madrugada, retirándose luego a descansar.

El propietario del night club acudió a la Fiscalía a prestar su declaración respecto a este tema, pero se abstuvo a declarar haciendo uso de su derecho constitucional.

La Fiscalía anticorrupción tiene en curso otra investigación contra el propietario del club por el supuesto delito de enriquecimiento ilícito de particulares con afectación al Estado. El club sigue precintado e intervenido desde el 8 de julio, mientras que la defensa del propietario, en reiteradas oportunidades pidió el desprecintado del local, la devolución de dinero y joyas que fueron secuestrados dentro de la investigación.

Sin embargo, la Fiscalía aún espera un informe completo de la Unidad de Investigación Financiera (UIF) en torno a los movimientos económicos del club y la utilización de NIT de las extranjeras para evadir los pagos de impuestos al Estado.

vía: el deber

Fuente: Detrás de la Verdad