La condena

Tengo finalizado un libro inspirado en Dante, que vuelve a caminar los nueve círculos del Infierno, las terrazas del Purgatorio y las esferas concéntricas del Paraíso…

Tengo redactada una disculpa a Jean Paul Sartre, por un texto mío que fue injusto con él…

Tengo listo un elogio a Charles Bukowski, porque un buen autor escribe muchos borradores, antes de legar al mundo cuatro o cinco frases imprescindibles…



Pero ya nada de eso importa.

Siento que me persigue, que me acecha, ¡que me amenaza!, una sentencia inútil de Borges:

“Es el amor. Tendré que ocultarme o que huir.”

(A Vanessa, en su cumpleaños…)

Fuente: Roberto Barbery Anaya.