Armas en Cuba y Venezuela, un telón para distraer del avance de la OTAN a Rusia

La manipulación mediática de un probable y no confirmado despliegue de fuerzas militares rusas en Cuba y Venezuela solo busca distraer la atención ante la peligrosa presencia de EEUU y la OTAN en las cercanías de la fronteras rusas, aseguró a Sputnik el analista político cubano Roberto García Hernández, experto en asuntos militares.

«La manipulación política e informativa de las declaraciones del vicecanciller ruso Serguéi Riabkov es una maniobra que, entre otros objetivos, intenta desviar la atención del tema principal, que es el incremento inusitado, ilegal y agresivo de la presencia de las fuerzas de todo tipo de la OTAN en las cercanías de la fronteras rusas», subrayó García Hernández, periodista y exdiplomático de la isla.



Ante una pregunta de una periodista del canal televisivo ruso RTVi el pasado 13 de enero, acerca de una probable presencia militar de Rusia en Cuba y Venezuela, Riabkov respondió que no podía «ni confirmar ni negar» los hipotéticos despliegues hacia estas naciones latinoamericanas.

Según el experto, esos voceros estadounidenses «han hecho gala de cierto nivel de ignorancia sobre la forma en que hoy en día funciona este tipo de mecanismo para establecer acuerdos de ese tipo, en los cuales resulta vital la aprobación de todas las partes involucradas, y no solo de una de esas partes».

«En todo este conflicto entre Rusia y EEUU, en el cual la OTAN es prácticamente un ente subordinado a Washington, hay una verdad fundamental, y es el hecho de que Rusia tiene todo el derecho a defenderse y buscar todas las vías posibles, en correspondencia con el derecho internacional y sus propias leyes, para evitar que la Alianza Atlántica ponga sus medios de fuego, en particular, sus cohetes y aviones estratégicos, a escasos minutos de Moscú», precisó García Hernández.

Insistió en que los ejercicios y despliegues militares de Washington y la OTAN cerca del territorio ruso, «son extremadamente desestabilizadores», como señala la Cancillería de Moscú, y, por ejemplo, los bombarderos con capacidades para portar armas nucleares estratégicas han volado hasta apenas 15 kilómetros de la frontera rusa, una situación que pone en tensión a quienes tienen que tomar decisiones para garantizar la defensa del país y sus intereses.

El analista cubano añadió que los expertos rusos vaticinan en los próximos dos o tres meses un incremento de las actividades de las fuerzas de reacción rápida y las fuerzas de operaciones especiales de la OTAN cerca de las fronteras rusas.

Realidad en Latinoamérica

El entrevistado destacó que «ninguno de los dos países (Cuba y Venezuela), a los que se refirió la periodista de RTVi en su pregunta a Riabkov, se ha manifestado al respecto, ni tampoco creo que estén obligados a hacerlo, pues fue una conversación, una entrevista en la cual el tema se abordó de manera tangencial».

Durante la entrevista a Riabkov, el funcionario respondió la pregunta de la reportera y apenas dijo que «ni confirmaba ni negaba» si en cualquier circunstancia Rusia analizaría la posibilidad de desplegar fuerzas y medios en otras naciones como contramedida simétrica a las actividades de la OTAN en áreas cercanas a sus fronteras.

Para el analista de la isla, en el plano hipotético, «Rusia tendría derecho a establecer algún tipo de acuerdo para el despliegue de infraestructuras militares en cualquier país, que en uso de sus facultades soberanas decida hacerlo, pero en el momento actual no hay ninguna evidencia pública de que esté en marcha un proceso de ese tipo».

El experto cubano insistió además en que es interesante «cómo, tanto en Europa como en América, se difundió la misma matriz de opinión sobre el tema, y los medios occidentales presentaron como una decisión o como una propuesta concreta la medida de enviar infraestructura militar a los dos países latinoamericanos».

«Eso desató —enfatizó— una cadena de opiniones contrarias a tal posibilidad, por parte de elementos que habitualmente aprovechan cualquier resquicio para expresar su odio hacia Cuba y Venezuela, y presentar la hipotética e inexistente ‘decisión’ de Rusia como una supuesta violación de la soberanía de las dos naciones latinoamericanas», indica el reporte de la agencia noticiosa Sputnik.

Fuente: ABI