EL SACO DE PECHOCHO

EL
SACO
DE
PECHOCHO…

Iba yo pasando por la UDS cuando elay.
– «Devolvéle el saco a Pechocho»
-dijo una voz.
Volteé la cara para ver de quien se trataba y ahí estaba.
No puej.
Al ratingo, viejas imágenes de canciones y guitarreadas en los banquillos de la Calleja, noches de radio en Trilogía, y el casette negro que me dejó con las mejores canciones de Los Terrícolas.
Recuerdos de las preca fuera de La Pascana, cuando las comparsas daban vuelta a la plaza, pa prender después pal Caballito, encabezados por don Gaby Dabdoub y su esposa.
Era otra época, cuando Julio Vaca Pereira tenía cabello y Mosito pedía tintos en Topsi.
Claro…
En los festivales intercolegiales se lucían las hermanas Chávez del colegio Santa Ana y los hermanos Fuentes en Muyurina, mientras Eric Weise nos contaba lo que pasaba en Arco Iris de Galavisión los domingos por la tarde, al volver del pirañee en El Buen Gusto.
Imposible no recordar la noche de precas, esa noche cuando aparecieron los PM por las cuatro esquinas de la plaza y salimos rajando, con el soldado que ya nos alcanzaba y la única puerta abierta en la Sucre, era la de la casa de Sandra Aliaga.
Y ahí nos metimos.
Hechos pelota dentro y el PM fuera, resignado a no llevarnos mientras por la acera del frente pasaba Sandro Guarayo con su saco morau en el hombro, con el ruido de sus suecos resonando en la calle vacía.
Sí, eran otros tiempos.
La época cuando aparecía el gordo bigotudo del autito rojo, ese comedido que se llevaba pelaus que aparecían estrenando cadenas, envidia de los otros que iban a la peluqueia de la calle La Paz, más allasingo de seduca.
En eso pensaba cuando lo vi al camba y de inmediato pensé y dije:
– ¿Gony?
No puej…
El ex presidente Gony nunca me pediría que le devuelva el saco a Pechocho…
Solo podía ser un camba johichi y buen tipo:
Mi amigo Monty.
Sí era él.

El ESCRIBIDOR.



Fuente: Párraga Jose – El ESCRIBIDOR