Otra versión del coraje

La conclusión de José María Barbieri en el último debate sobre Roberto Arlt provocó asombro y rechazo. Dijo así:

“Parece que la falta de libertad es el temor a perder algo. Creo que por eso los personajes de Arlt buscan hundirse moralmente. Se trataría de una visión plena de la libertad: caer tan radicalmente, que ya no haya ningún prestigio que cuidar…”.

Luego añadió:



“Parece desaconsejable, ¿no? Bueno, en ello encontraríamos una de las paradojas de Arlt: en insinuar que, en sentido estricto, la libertad es inabarcable en nuestra época, porque supone renunciar a cualquier noción de piedad urbana, sobre todo con uno mismo…”.

“Ningún orden se puede defender con tanques de un solo hombre”, agregó misteriosamente antes de irse…

Para todos fue una decepción. Habíamos ido listos para escuchar una exaltación política de la libertad…

Pero la venganza fue puntualísima. Por enésima vez recibió insultos de “perfiles falsos”… Lo menos ilegible que le escribieron era que tenía la manera de razonar de un salvaje…

José María contestó que en su falta de civilización podía verse inclusive alguna virtud, recordando una paradoja que Arlt pone en boca de uno de sus personajes infames:

“Soy un civilizado. No puedo creer en el coraje. Creo en la traición.”.

Fuente: Roberto Barbery Anaya.