Experta de la Uagrm dice que el cuestionario censal es complicado, pero cumple parámetros

La experta Melvy Vargas observa que la autoidentificación de los niños será respondida por los padres y eso «podría inflarla». En otros casos esta pregunta se restringía a mayores de 15 años

Luis Marcelo Tedesqui Vargas

Melvy Vargas dice que el cuestionario está en los parámetros.
Melvy Vargas dice que el cuestionario está en los parámetros.

Fuente: El Deber

Melvy Vargas, catedrática de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Uagrm) y miembro del comité interinstitucional, señaló que el cuestionario del Censo de Población y Vivienda, que se realizará el próximo año, es complejo, pero que las preguntas guardan los parámetros internacionales.



En una entrevista en el programa ¡Qué semana!, de EL DEBER Radio, Vargas explicó que los censos tienen una limitación en lo que se refiere a la cantidad de preguntas. “No se puede atender las necesidades de todas las instituciones y de todas las regiones. Las 59 preguntas no van a responder a todas las inquietudes, pero tampoco se puede ampliar más. Es ya una boleta bastante complicada, porque, si bien son casi 60 preguntas, algunas de ellas se abren con otras preguntas, como la parte de mortalidad, la de migración y se incorporan otras cinco subpreguntas al interior de ellas. Eso significa sumar más preguntas y demorar más el trabajo del agente censal empadronando a cada persona”, analizó.

Las preguntas contienen las tres grandes partes que siempre tienen los censos: Ubicación geográfica, que permite hacer la distribución por departamentos, municipios, localidades y otras unidades geográficas que se puedan detallar.

Segundo, que hace una sola vez, es la de vivienda. “Tipo, característica, material utilizado en su construcción, los servicios básicos, el equipamiento que tiene. Se ha incorporado en esta oportunidad la emigración internacional, que incluye otras cinco preguntas que tienen que ver con dónde vive actualmente”.

Se incorpora la mortalidad y, a diferencia de otros censos, donde se tomaba en cuenta lo ocurrido en los últimos 12 meses, “ahora se indaga el 2019, para captar los decesos producidos por el covid-19. Son otras cinco preguntas que tienen que ver con la edad que tenía la persona, sexo, causa y mortalidad materna. Luego, desde la pregunta 24 hasta la 59, vienen las que son individualizadas. “Se hace a cada integrante, a cada persona sobre fecundidad, educación, etc.”.

En el censo de 2012 se incorporó una categoría que señalaba “no soy boliviano”, para separar a los bolivianos con aquellos que se auto identificaban con algún pueblo originario. Ahora, en el caso del Censo de Población y Vivienda 2024 está la posibilidad de responder si una persona se auto identifica o no con un pueblo, pero no está separado de ser o no boliviano.

En el caso de preguntas sobre menores de esa edad, el padre o la madre darán las respuestas. “Hay una población (los menores de edad) que no puede auto identificarse y no estará en la capacidad de hacerlo. Lo harán sus padres y ahí estamos inflando un poco”, aseveró.

Recordó que en el Censo del 2001 se les consultó sólo a los mayores de 15 años. “Ahí hay datos que no son del todo comparables de un censo a otro”, manifestó.

Fuente: El Deber