«La mentira tiene patas cortas». El presidente Luis Arce niega la crisis y dice que los organismos internacionales mienten, pero luego sale diciendo que «no hay plata».
Promete industrialización pero dice que ya NO hay gas porque no se exploró, pero no explica con qué energía va mover esas industrias, y tampoco explica qué hicieron con los más de 3.000 millones de dólares destinados a la exploración (que nunca dieron resultados) cuando el era el ministro de Economía de Evo Morales.
Habla de baja inflación mientras los empresarios se ven obligados a subir precios porque tienen que comprar insumos y mercadería con un dólar paralelo que está por llegar a los 10 bolivianos.
Habla de progreso y restringe a los emprendedores, limitando su capacidad de crecer.
Presidente Arce, usted, Evo Morales y el modelo masista le mintieron al país y taparon esas mentiras con un auge económico que ya se acabó, que nunca fue producto de su gestión, que siempre dependió de un auge internaional.
Pero «la mentira tiene patas cortas» y los bolivianos ya nos dimos cuenta, es por eso que el masismo está agotado, desesperado, dividido, y su popularidad presidente Arce está por el suelo.
Tenga dignidad y asuma la crisis con responsabilidad sin pensar en el poder, la historia lo juzgará como lo está juzgando a Evo Morales.
Bolivia necesita un cambio.
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