UN HOMBRE DIFERENTE, UNA PERSONA DIFERENTE. Ya llegan las fiestas. Es fin de año y es t…

UN
HOMBRE
DIFERENTE,
UNA PERSONA
DIFERENTE.

Ya llegan las fiestas.
Es fin de año y es tiempo de celebrar.
De acuerdo.
Pero…
¿Celebrar qué?
Celebrar la vida, la buena salud y la alegría de disfrutar en familia, diría alguien…
Entiendo.
¿Algo más?
Sí.
Celebrar el nacimiento de un hombre diferente.
Bueno…
Convengamos que ese hombre no nació en esta fecha y está claro que nadie sabe la fecha exacta de su nacimiento, no hay registro oficial.
Convengamos que navidad es un simbolismo adoptado por el papado, para recordar el nacimiento de ese hombre diferente.
Esta bien…
Pero eso no es el tema de fondo.
¿Cómo te explico?
Mirá…
Navidad, es mucho más que una cena con la mesa repleta a media noche
Navidad, va mucho más allá de las millonarias campañas publicitarias, esas que te incentivan a comprar y gastar como sea.
Navidad, no es el gordo de rojo, ni las mamanuelas en tanga que te incentivan a la compra, tristes personajes a quienes la publicidad hizo más importantes y llamativos que el recién nacido dijqué homenajeado.
Navidad, es otra cosa.
Navidad, es solo el recordatorio del nacimiento de un hombre diferente, alguien que vivió y murió de forma diferente.
Navidad recuerda a alguien que no se autosantificaba.
Navidad recuerda a alguien que vivía en función a lo que predicaba.
Navidad recuerda a un hombre simple en su escencia.
Navidad recuerda a alguien que le reclamaba sin miedo, al poder político abusivo y corrupto de su época.
Navidad recuerda a alguien que lloró por un amigo muerto.
Navidad recuerda a alguien que fue leal a sus convicciones, a alguien que no vendió sus ideales.
Navidad recuerda al hombre que sufrió la ingratitud y la traición de sus más cercanos.
Navidad recuerda al hombre, a ese que al momento de su muerte solo tuvo a su madre, y todo porque los que decían ser sus amigos lo abandonaron.
La madre, ese extraño ser que nunca falla.
Y bueno…
¿Estás solo en esta época navideña?
No sos el único.
Millones de personas sufren de soledad, otro tanto reposa en alguna cama de enfermo.
¿Querés una navidad diferente?
Te paso la formula:
Pensá desde hoy en la vida del recién nacido, tratá de pensar y vivir como él, sentí la necesidad ajena como él, y soñá con un mundo diferente como él…
Creeme:
No es tan difícil en los hechos.
¿Te quejás del mundo que tenemos hoy?
¿Querés cambiar las cosas que se viven hoy?
Empezá por vos primero.
Es simple:
Convertite en una persona diferente, para poder vivir una vida diferente.
¿Entendés ahora?
Eso es lo que recuerda navidad:
El nacimiento de un hombre diferente.
En síntesis.
¿Pagarías el precio de ser alguien diferente?
Pensala.
El hombre nacido en navidad, pagó ese precio con su vida.
¿Vos estarías dispuesto a hacerlo?
Como sea choco:
Feliz navidad.

El ESCRIBIDOR.



Fuente: Párraga Jose – El ESCRIBIDOR